09. Fosa Pterigopalatina
La fosa pterigopalatina es un pequeño espacio piramidal, inferior al vértice de la órbita y medial a la fosa infratemporal (fig. 8-97). Está situada entre el proceso pterigoides del esfenoides posteriormente y la cara posterior redondeada del maxilar anteriormente. La frágil lámina perpendicular del hueso palatino forma su pared medial. La pared superior incompleta de la fosa pterigopalatina está constituida por una continuación medial de la cara infratemporal del ala mayor del esfenoides. La pared inferior está formada por el proceso piramidal del hueso palatino. Su amplio extremo superior se abre anterosuperiormente en la fisura orbitaria inferior; su extremo inferior es estrecho y se continúa con los conductos palatinos mayor y menor. La fosa se comunica a través de muchas vías, con entrada y salida de nervios y vasos desde o hacia la mayor parte de los principales compartimentos del viscerocráneo (fig. 8-98 A).
El contenido de la fosa pterigopalatina (fig. 8-98 B y C) consiste en:
- La porción terminal (pterigopalatina o tercera) de la arteria maxilar y las porciones iniciales de sus ramas, así como las venas satélites (tributarias del plexo venoso pterigoide).
- El nervio maxilar (NC V2), relacionado con el ganglio pterigopalatino. Se considera que los ramos que surgen del ganglio en el interior de la fosa son ramos del nervio maxilar.
- Vainas vasculonerviosas de los vasos y nervios, y una matriz adiposa, que ocupan todo el espacio restante.
Porción pterigopalatina de la arteria maxilar
La arteria maxilar, una rama terminal de la arteria carótida externa, discurre anteriormente a través de la fosa infratemporal, como se ha descrito previamente. La porción pterigopalatina de la arteria maxilar, o tercera porción (localizada anteriormente al músculo pterigoideo lateral), discurre medialmente a través de la fisura pterigomaxilar y penetra en la fosa pterigopalatina (figs. 8-98 B y 8-99 A). La arteria se sitúa anteriormente al ganglio pterigopalatino y emite ramas que acompañan a todos los nervios que entran y salen de dicha fosa, con muchos de los cuales comparten su denominación (tabla 8-12).
Nervio maxilar
El nervio maxilar discurre anteriormente a través del foramen redondo y penetra en la fosa pterigopalatina por su pared posterior (figs. 8-98 C, 8-99 B y 8-100 C). Dentro de la fosa, el nervio maxilar da origen al nervio cigomático, que se divide en los nervios cigomaticofacial y cigomaticotemporal (figs. 8-99 B y 8-100 A). Estos nervios, que surgen del hueso cigomático a través de los forámenes craneales homónimos, aportan la sensibilidad general a la región lateral de la mejilla y la sien.
El nervio cigomaticotemporal también da origen a un ramo comunicante, que lleva fibras parasimpáticas postsinápticas secretomotoras a la glándula lagrimal por medio del nervio lagrimal del NC V1, que hasta ese punto es puramente sensitivo (fig. 8-100 A y B).
Todavía en la fosa pterigopalatina, el nervio maxilar emite además los dos ramos ganglionares para el ganglio pterigopalatino (raíces sensitivas del ganglio pterigopalatino), que sustentan el ganglio pterigopalatino parasimpático en la parte superior de la fosa pterigopalatina (figs. 8-98 C y 8-100 A). Los nervios pterigopalatinos transportan fibras sensitivas generales del nervio maxilar, que atraviesan el ganglio pterigopalatino sin hacer sinapsis e inervan la nariz, el paladar y la faringe (fig. 8-100 C). El nervio maxilar abandona la fosa pterigopalatina a través 1709de la fisura orbitaria inferior, después de lo cual se denomina nervio infraorbitario (figs. 8-98 C y 8-99 B).
Las fibras parasimpáticas del ganglio pterigopalatino proceden del nervio facial a través de su primer ramo, el nervio petroso mayor (figs. 8-98 C y 8-100 A y B), que se une al nervio petroso profundo a su paso por el foramen rasgado para formar el nervio del conducto pterigoideo, que discurre anteriormente a través de este conducto hasta la fosa pterigopalatina. Las fibras parasimpáticas del nervio petroso mayor hacen sinapsis en el ganglio pterigopalatino.
El nervio petroso profundo es un nervio simpático que surge del plexo periarterial de la carótida interna cuando esta sale del conducto carotídeo (figs. 8-98 C y 8-100 A y C). Transporta fibras postsinápticas de los cuerpos neuronales del ganglio simpático cervical superior al ganglio pterigopalatino, mediante su unión con el nervio del conducto pterigoideo. Las fibras no hacen sinapsis en el ganglio, sino que lo atraviesan y pasan directamente a los ramos (del NC V2) que salen de él (fig. 8-100 C). Las fibras simpáticas postsinápticas pasan a las glándulas palatinas y mucosas de la cavidad nasal y la porción superior de la faringe.