07. Linfáticos del Cuello
La mayoría de los tejidos superficiales del cuello son drenados por vasos linfáticos que entran en los nódulos linfáticos cervicales superficiales, localizados a lo largo del recorrido de la VYE. La linfa de estos nódulos, al igual que la linfa de toda la cabeza y el cuello, drena en los nódulos linfáticos cervicales profundos inferiores (figs. 9-51 y 9-52). El grupo específico de nódulos linfáticos cervicales profundos inferiores implicado aquí desciende a través de la región cervical lateral junto con el nervio accesorio (NC XI).
La mayor parte de la linfa de estos seis a ocho nódulos drena luego en los nódulos linfáticos supraclaviculares, que acompañan a la arteria cervical transversa. El grupo principal de nódulos cervicales profundos forma una cadena a lo largo de la VYI, mayoritariamente cubiertos por el ECM. Otros nódulos cervicales profundos incluyen los nódulos prelaríngeos, pretraqueales, paratraqueales y retrofaríngeos. Los vasos linfáticos eferentes de los nódulos cervicales profundos se unen para formar los troncos linfáticos yugulares, que normalmente se unen al conducto torácico en el lado izquierdo, mientras que en el lado derecho entran en la unión de las venas yugular interna y subclavia (ángulo venoso derecho) directamente o a través de un corto conducto linfático derecho.
El conducto torácico pasa superiormente atravesando la abertura superior del tórax a lo largo del borde izquierdo del esófago. Se arquea lateralmente en la raíz del cuello, posterior a la vaina carotídea y anterior al tronco simpático y a las arterias vertebral y subclavia (fig. 9-52 B). El conducto torácico drena en la vena braquiocefálica izquierda en la unión de la vena subclavia y las VYI (ángulo venoso izquierdo). Cuando los troncos linfáticos yugular derecho, subclavio y broncomediastínico se unen para formar el conducto linfático derecho, este entra en el ángulo venoso derecho, como hace el conducto torácico en el lado izquierdo (fig. 9-52 A). Sin embargo, a menudo estos troncos linfáticos desembocan en el sistema venoso de forma independiente, en la región del ángulo venoso derecho.