Miembro Superior

Este es un resumen del miembro superior que le ayudará a repasar los aspectos relevantes de la materia de cara a un hipotético examen.

Comparación entre los miembros superior e inferior

El desarrollo y la estructura de los miembros superiores e inferiores tienen mucho en común; no obstante, el miembro superior se ha convertido en un órgano móvil que permite a los seres humanos no sólo responder a su entorno, sino también manipularlo y controlarlo en gran medida.

El miembro superior está compuesto por cuatro segmentos cada vez más móviles a medida que se progresa distalmente: los tres proximales (hombro, brazo y antebrazo) sirven principalmente para posicionar el cuarto (mano), que se utiliza para la prensión, la manipulación y el tacto.

Cuatro características permiten el funcionamiento independiente de los miembros superiores, gracias al cual las manos se pueden posicionar con exactitud y tiene lugar una coordinación precisa entre la vista y las manos:

  1. los miembros superiores no están implicados en el soporte de peso ni en la deambulación,
  2. la cintura escapular está unida al esqueleto axial sólo anteriormente y mediante una articulación muy móvil,
  3. los huesos emparejados del antebrazo pueden moverse cada uno en relación con el otro, y
  4. las manos están dotadas de dedos largos y móviles y de un pulgar oponible.

Huesos del miembro superior

Clavícula

La clavícula, situada subcutáneamente, conecta el miembro superior (esqueleto apendicular superior) con el tronco (esqueleto axial).

La clavícula actúa como un puntal móvil, similar a una grúa (soporte externo), del cual penden la escápula y el miembro libre a una distancia del tronco que les otorga libertad de movimientos.

Los golpes recibidos por el miembro superior (especialmente en el hombro) se transmiten a lo largo de la clavícula y provocan fracturas, con mayor frecuencia en sus tercios medio y lateral.

La clavícula es el primer hueso largo que se osifica y el último que se forma completamente.

Escápula

La escápula constituye la base móvil sobre la que actúa el miembro superior libre.

Este hueso plano triangular está curvado para adaptarse a la pared torácica y dispone de amplias áreas y bordes para la inserción de músculos.

La acción de estos músculos consiste en:

  1. mover la escápula sobre la pared torácica en la unión escapulotorácica fisiológica, y
  2. extenderse hacia el húmero proximal para mantener la integridad de (e inducir movimientos en) la articulación del hombro.

La espina de la escápula y el acromion actúan como palancas; el acromion permite que la escápula y los músculos que en ella se insertan se localicen medialmente contra el tronco junto con las articulaciones acromioclavicular y del hombro, y ello les permite movimientos laterales con respecto al tronco.

El proceso coracoides de la escápula es el lugar de inserción del ligamento coracoclavicular (que sostiene pasivamente el miembro superior) y también de músculos (tendones).

Húmero

El largo y fuerte húmero es un puntal móvil (el primero de una serie de dos) que se utiliza para posicionar la mano a la altura y la distancia necesarias para maximizar su eficiencia.

La cabeza esférica del húmero permite una gran variedad de movimientos de este sobre su base escapular móvil; la tróclea y el capítulo de su extremo distal facilitan los movimientos trocleares del codo y, a la vez, el pivotamiento (trocoide) del radio.

El largo cuerpo del húmero aumenta el radio de acción y configura una eficaz palanca que aplica potencia en el levantamiento de objetos; además, proporciona superficie para la inserción de músculos que actúan principalmente en el codo.

Los epicóndilos (extensiones medial y lateral del cuerpo del húmero) proporcionan una superficie adicional para la inserción de músculos flexores y extensores del carpo.

Ulna y radio

En conjunto, la ulna y el radio configuran la segunda unidad de un puntal articulado (del cual la primera unidad es el húmero) que, proyectándose desde una base móvil (hombro), sirve para posicionar la mano.

Como la unidad del antebrazo está formada por dos huesos paralelos y el radio puede pivotar alrededor de la ulna, son posibles movimientos de pronación y supinación de la mano cuando el codo está flexionado.

Proximalmente, la ulna (de mayor tamaño y en situación medial) forma la articulación principal con el húmero, mientras que distalmente el radio (más corto y en situación lateral) forma la articulación principal con la mano a través del carpo.

La ulna no alcanza el carpo, y por ello las fuerzas recibidas por la mano se transmiten del radio a la ulna a través de la membrana interósea.

Mano

Cada segmento del miembro superior aumenta la funcionalidad de su unidad distal: la mano.

Localizada en el extremo libre de un puntal articulado que consta de dos unidades (brazo y antebrazo) y se proyecta desde una base móvil (hombro), la mano puede adoptar una amplia variedad de posiciones en relación con el tronco.

Gracias a la conexión que establece la mano con el puntal flexible a través de los múltiples huesos de pequeño tamaño que forman el carpo, y a la capacidad de pivotamiento del antebrazo, aumenta en gran medida la capacidad para situarla en una posición concreta y con los dedos orientados para flexionarse (empujar o agarrar) en la dirección necesaria.

Los huesos carpianos se disponen en dos hileras formadas por cuatro huesos cada una, y como grupo se articulan con el radio proximalmente y con los metacarpianos distalmente.

Los dedos, largos y muy flexibles, se extienden desde una base semirrígida (la palma) y permiten agarrar, manipular y realizar tareas complejas que implican múltiples movimientos individuales simultáneos (p. ej., escribir a máquina o tocar el piano).

Anatomía de superficie

El miembro superior presenta múltiples puntos óseos palpables de referencia que son útiles:

  1. cuando se diagnostican fracturas, luxaciones o malformaciones;
  2. para deducir la posición de estructuras más profundas, y
  3. para describir de forma precisa la localización de incisiones y sitios de punción terapéutica, o de áreas afectadas por patología o lesiones.

Fascias, vasos eferentes, inervación cutánea y miotomas del miembro superior

Fascias

La firme fascia profunda del miembro superior rodea y contiene las estructuras del miembro como una membrana limitadora de la expansión situada en profundidad a la piel y al tejido subcutáneo.

La superficie profunda de la fascia, que en ocasiones sirve para extender la superficie disponible para el origen de los músculos, se inserta en los huesos que rodea, ya sea directamente o mediante tabiques intermusculares.

Así, la fascia profunda forma compartimentos fasciales que contienen músculos individuales o grupos de músculos con funciones e inervaciones similares.

Los compartimentos también contienen o dirigen la extensión de infecciones o hemorragias.

Venas superficiales

La vena cefálica discurre a lo largo del margen craneal (cefálico) del miembro, mientras que la basílica lo hace a lo largo del margen caudal (basal).

Ambas venas proceden de la red venosa dorsal de la mano; una (vena basílica) drena en el principio de la vena axilar, y la otra (vena cefálica) en el final.

Venas profundas

Las venas profundas de los miembros normalmente discurren como vasos satélites pares que reciben el mismo nombre que las arterias a las que acompañan.

Vasos linfáticos

Los vasos linfáticos superficiales convergen en general con las venas superficiales y las siguen en su trayecto, y los vasos linfáticos profundos siguen a las venas profundas.

La linfa recogida en el miembro superior por los vasos linfáticos superficiales y profundos drena en los nódulos linfáticos axilares.

Dermatomas

Como consecuencia de la formación de plexos, se observan dos patrones de inervación cutánea en el miembro superior:

  1. inervación segmentaria (dermatomas) por parte de nervios espinales, y
  2. inervación por nervios periféricos (dotados de nombre) multisegmentarios.

El primer patrón es más fácil de visualizar si el miembro se sitúa en su posición embrionaria inicial (abducida y con el pulgar dirigido superiormente).

Así, los segmentos progresan en orden descendente a lo largo del miembro (inicialmente con el dermatoma C4 en la raíz del cuello, para luego continuar lateral o distalmente a lo largo de la superficie superior y después medial o proximalmente a lo largo de la superficie inferior, para acabar en la pared torácica con el dermatoma T2).

Inervación cutánea

Al igual que en el caso del plexo braquial, que forma un fascículo posterior, uno lateral y uno medial (pero ninguno anterior), el brazo y el antebrazo están dotados de nervios posteriores, laterales y mediales (pero no anteriores).

Los nervios cutáneos mediales son ramos del fascículo medial del plexo braquial.

Los nervios cutáneos posteriores son ramos del nervio radial.

Cada uno de los nervios cutáneos laterales procede de una fuente distinta (nervios axilar, radial y musculocutáneo).

Miotomas

La mayoría de los músculos del miembro superior contienen componentes de más de un miotoma, y por ello reciben fibras motoras de diversos segmentos de la médula espinal o nervios espinales.

Así pues, en los movimientos del miembro superior están implicados múltiples segmentos de la médula espinal.

Los músculos intrínsecos de la mano constituyen un único miotoma (T1).

Músculos del segmento proximal del miembro superior

En función de sus inserciones, los músculos del segmento proximal del miembro superior se clasifican en axioapendiculares y escapulohumerales.

Músculos axioapendiculares

Los músculos axioapendiculares sirven para posicionar la base sobre la cual el miembro superior se extiende y actúa en relación con el tronco.

Se dividen en un grupo anterior, uno posterior superficial y uno posterior profundo.

Estos grupos actúan antagónicamente para elevar-deprimir y protraer-retraer toda la escápula, o bien para rotarla, y así elevar o descender la cavidad glenoidea y la articulación del hombro (tabla 3-5).

Estos movimientos amplían la variedad funcional de movimientos en la articulación del hombro.

En todos ellos están implicadas tanto la clavícula como la escápula; los límites a todos los movimientos de la segunda están impuestos por la primera, que es la que establece la única unión con el esqueleto axial.

En la mayoría de estos movimientos participan de forma cooperativa músculos con inervaciones distintas. Por ello, en general las lesiones que afectan a un único nervio típicamente debilitan, pero no eliminan, un movimiento.

Dos notables excepciones son la rotación hacia arriba del ángulo lateral de la escápula (sólo parte superior del trapecio/nervio accesorio) y la rotación lateral del ángulo inferior de la escápula (sólo parte inferior del serrato anterior/nervio torácico largo).

Músculos escapulohumerales

Los músculos escapulohumerales (deltoides, redondo mayor y músculos del manguito de los rotadores) actúan junto con ciertos músculos axioapendiculares como grupos opuestos que posicionan el puntal proximal del miembro superior (el húmero) mediante movimientos de abducción-aducción, flexión-extensión, rotación medial-lateral y circunducción del brazo.

Estos movimientos establecen la altura, la distancia del tronco y la dirección con que actuarán el antebrazo y la mano.

Prácticamente todos los movimientos inducidos por los músculos escapulohumerales en la articulación del hombro se acompañan de movimientos inducidos por los músculos axioapendiculares en las articulaciones esternoclavicular y escapulotorácica, en especial después de las fases iniciales del movimiento.

Un examinador experto con conocimientos de anatomía puede fijar manualmente o posicionar el miembro para aislar y explorar porciones determinadas de movimientos específicos del miembro.

Los músculos del manguito de los rotadores rotan la cabeza del húmero (abduciendo y rotando lateral y medialmente el húmero) y la sujetan firmemente contra el poco profundo receptáculo formado por la cavidad glenoidea, con lo cual aumentan la integridad de la cápsula de la articulación del hombro.

Axila

La axila es un compartimento (centro de distribución) fascial piramidal relleno de tejido adiposo que da paso o aloja a las principales «herramientas» que prestan servicio (irrigan, inervan, drenan y comunican) al miembro superior.

Las estructuras axilares normalmente están protegidas por el brazo, pero son vulnerables cuando este se encuentra en abducción. El reflejo de «cosquillas» nos obliga a recuperar la postura de protección cuando se detecta una amenaza.

Las estructuras que atraviesan la fosa axilar están cercadas por una envoltura protectora (vaina axilar), englobadas en una matriz amortiguadora flexible (tejido adiposo axilar) y rodeadas de paredes osteomusculares.

Por la fosa axilar discurren estructuras neurovasculares que pasan o se dirigen hacia el cuello, tórax y el miembro superior en su totalidad (incluyendo regiones pectoral, escapular y subescapular, y miembro superior libre).

Vena y arteria axilares

La vena axilar se sitúa por delante y ligeramente inferior a la arteria axilar, y ambas están rodeadas por la vaina fascial axilar.

Para facilitar su descripción, la arteria axilar y la vena axilar se han dividido en tres porciones (medial, posterior y lateral respecto al pectoral menor). Se da la coincidencia de que la primera parte de la arteria está dotada de una rama, la segunda de dos y la tercera de tres.

Nódulos linfáticos axilares

Están englobados en el tejido adiposo axilar, externamente a la vaina axilar.

Los nódulos linfáticos axilares se distribuyen en grupos que están dispuestos y reciben linfa en un orden específico; esta característica es importante en la estadificación y en la determinación del tratamiento adecuado del cáncer de mama.

Los nódulos linfáticos axilares reciben linfa del miembro superior y de todo el cuadrante superior de la pared superficial del tronco, desde el nivel de las clavículas hasta el del ombligo, incluida la mayor parte de la mama.

Plexo braquial

El plexo braquial es una interconexión organizada de fibras nerviosas procedentes de los cinco ramos anteriores adyacentes (C5-T1, las raíces del plexo) que inervan el miembro superior.

Aunque su identidad segmentaria se pierde al formar el plexo, su disposición segmentaria original se mantiene en la piel (dermatomas, con una distribución de craneal a caudal) y en los músculos (miotomas, con una distribución de proximal a distal). Por ejemplo, las fibras de C5 y C6 inervan principalmente músculos que actúan sobre el hombro o flexionan el codo; las fibras de C7 y C8 inervan músculos que extienden el codo o son parte del antebrazo y las fibras de T1 inervan los músculos intrínsecos de la mano.

En las fases iniciales de la formación del plexo braquial se fusionan los pares de raíces superior e inferior para formar tres troncos, cada uno de los cuales se ramifica en divisiones anteriores y posteriores.

Las fibras que circulan por divisiones anteriores inervan flexores y pronadores de los compartimentos anteriores del miembro, y las que circulan por divisiones posteriores inervan extensores y supinadores de los compartimentos posteriores.

Las cinco divisiones se fusionan para formar tres fascículos que rodean la arteria axilar.

Dos de los tres fascículos dan origen a su vez a cinco nervios, y el tercero (fascículo lateral) da origen a tres nervios.

Además de los nervios que se originan de los fascículos, diez más nacen en diversas partes del plexo.

La mayoría de los nervios procedentes del plexo son multisegmentarios, contienen fibras de dos o más ramos anteriores adyacentes.

Brazo y fosa del codo

Brazo

El brazo forma una columna con el húmero en su centro.

El húmero, junto con los tabiques intermusculares situados en sus dos tercios distales, divide longitudinalmente el brazo (o más concretamente el espacio incluido dentro de la fascia del brazo) en un compartimento anterior o flexor y uno posterior o extensor.

El compartimento anterior contiene tres músculos flexores inervados por el nervio musculocutáneo.

El coracobraquial actúa (débilmente) sobre el hombro, y el bíceps braquial y el braquial lo hacen sobre el codo.

El bíceps braquial es también el principal supinador del antebrazo (cuando el codo está flexionado).

El braquial es el principal flexor del antebrazo.

El compartimento posterior contiene el tríceps braquial, un músculo extensor de tres cabezas que está inervado por el nervio radial.

Una de sus cabezas (la larga) actúa sobre el hombro, pero estas trabajan básicamente juntas para extender el codo.

Ambos compartimentos del brazo están irrigados por la arteria braquial (el posterior fundamentalmente a través de su principal rama, que es la arteria braquial profunda).

El paquete vasculonervioso principal se localiza en la cara medial del miembro, de modo que este normalmente lo protege.

Fosa del codo

La fosa del codo, de forma triangular, está limitada por una línea que conecta los epicóndilos medial y lateral del húmero, y por el pronador redondo y el braquiorradial, que se originan, respectivamente, en dichos epicóndilos.

El braquial y el supinador forman el suelo.

El tendón del bíceps braquial desciende por dentro del triángulo para insertarse en la tuberosidad del radio.

Medialmente al tendón se encuentran el nervio mediano y la parte terminal de la arteria braquial.

Lateralmente al tendón discurren el nervio cutáneo lateral del antebrazo superficialmente, y la parte terminal del nervio radial más profundamente.

En la mayoría de los casos, por el tejido subcutáneo de la fosa discurre oblicuamente una vena mediana del codo que conecta la vena cefálica del antebrazo con la vena basílica del brazo; cuando está presente, constituye una buena vía de venopunción.

En aproximadamente una quinta parte de la población, en lugar de la vena mediana del codo existe una vena mediana del antebrazo que se divide en una vena mediana basílica y una vena mediana cefálica.

Antebrazo

Músculos del compartimento anterior del antebrazo

Los músculos superficiales e intermedios del compartimento anterior (flexor-pronador) del antebrazo se localizan anteromedialmente porque su origen principal se encuentra en la inserción común de los flexores (epicóndilo medial y cresta supracondílea medial) del húmero.

Los músculos de la capa superficial «doblan» la muñeca para posicionar la mano (es decir, flexionan el carpo cuando se contraen de forma aislada, y lo aducen o abducen cuando actúan con sus homólogos extensores) y ayudan en la pronación.

El único músculo que ocupa la capa intermedia (flexor superficial de los dedos) flexiona principalmente las articulaciones proximales de los dedos 2º a 5º.

Los músculos de la capa profunda se insertan en las caras anteriores del radio y la ulna, flexionan todas las articulaciones (en particular las distales) de los cinco dedos, y pronan el antebrazo.

Los músculos del compartimento anterior están inervados principalmente por el nervio mediano, pero en uno y medio (el flexor ulnar del carpo y la mitad ulnar del flexor profundo de los dedos) la inervación corre a cargo del nervio ulnar.

La flexión del carpo y la mano se utiliza para agarrar, sujetar y tirar de objetos hacia uno mismo.

La pronación se utiliza para posicionar la mano de modo que pueda manipular o agarrar cosas. Ambos movimientos son básicamente protectores (defensivos).

Músculos del compartimento posterior del antebrazo

Los músculos extensores-supinadores del compartimento posterior del antebrazo se localizan posterolateralmente en el antebrazo proximal y están inervados por el nervio radial.

El supinador actúa sobre las articulaciones radioulnares, mientras que todos los demás extienden y abducen la mano en el carpo y el pulgar.

El extensor ulnar del carpo también contribuye en la aducción de la mano.

Los músculos extensores se vuelven tendinosos en el antebrazo distal y pasan profundos al retináculo de los músculos extensores, por dentro de túneles osteofibrosos.

Los tendones que se dirigen hacia los cuatro dedos mediales forman complejas expansiones extensoras en las caras dorsales de los dedos.

La extensión («amartillado») del carpo es importante para que los flexores de los dedos permitan agarrar con fuerza o cerrar el puño.

Venas superficiales y nervios cutáneos del antebrazo

Por el tejido subcutáneo del antebrazo discurren venas subcutáneas bien desarrolladas. Estas venas están sujetas a una gran variabilidad.

Una vez que han atravesado la fascia profunda, los nervios cutáneos siguen un trayecto independiente del de las venas por el tejido subcutáneo, donde se mantienen constantes en cuanto a localización y tamaño; los nervios cutáneos lateral, medial y posterior del antebrazo inervan las caras del antebrazo descritas por sus nombres.

Paquetes vasculonerviosos del antebrazo

En profundidad a la fascia del antebrazo discurren tres paquetes vasculonerviosos principales (radial, mediano o medio, y ulnar) y dos secundarios (interóseos anterior y posterior).

El paquete vasculonervioso radial (que contiene la arteria radial, venas satélites y el nervio radial superficial) sigue y define el borde situado entre los compartimentos anterior y posterior del antebrazo (las estructuras vasculares irrigan y drenan a ambos), en profundidad respecto al braquiorradial.

Los paquetes medio (nervio mediano, y las variables arteria y venas medianas) y ulnar (nervio ulnar, arteria ulnar y venas satélites) discurren por un plano fascial situado entre los músculos flexores intermedios y profundos. El nervio mediano inerva la mayoría de los músculos del compartimento anterior, en muchos casos a través de su ramo interóseo anterior, que pasa por encima de la membrana interósea.

Existe una excepción y media (flexor ulnar del carpo y mitad ulnar del flexor profundo de los dedos) en que la inervación corre a cargo del nervio ulnar.

El ramo profundo del nervio radial penetra en el supinador para encontrarse con la arteria interósea posterior en un plano situado entre los extensores superficiales y profundos. Este nervio inerva todos los músculos que se originan en el compartimento posterior.

Los músculos flexores del compartimento anterior tienen aproximadamente el doble de masa y de fuerza que los extensores del compartimento posterior. Debido a este hecho, y a que la cara flexora del miembro es la más protegida, las principales estructuras vasculonerviosas se encuentran en el compartimento anterior (sólo los relativamente pequeños vasos y nervio interóseos posteriores discurren por el compartimento posterior).

Mano

Movimientos

Los movimientos más amplios (de mayor extensión) y potentes de la mano y de los dedos (agarrar, pinzar y señalar) están producidos por músculos extrínsecos con vientres carnosos que se localizan a distancia de la mano (cerca del codo) y por tendones largos que se dirigen a la mano y los dedos.

Los movimientos más cortos, delicados y débiles (escribir a mano o a máquina, y tocar instrumentos musicales), y el posicionamiento de los dedos para los movimientos más potentes, dependen en gran medida de los músculos intrínsecos.

Organización

Los músculos y tendones de la mano se disponen en cinco compartimentos fasciales: dos compartimentos radiales (tenar y aductor) que actúan sobre el pulgar, un compartimento ulnar (hipotenar) que actúa sobre el dedo meñique, y dos más centrales que actúan sobre los cuatro dedos mediales (uno palmar para los tendones de los flexores largos y para los lumbricales, y uno profundo entre los metacarpianos para los interóseos).

Músculos

La mayor parte de la masa de los músculos intrínsecos actúa sobre el pulgar, que está dotado de una gran libertad de movimientos. De hecho, si se cuentan también los extrínsecos, el pulgar está dotado de ocho músculos que inducen y controlan la amplia variedad de movimientos que distinguen a la mano humana.

Los interóseos generan múltiples movimientos: los interóseos dorsales (junto con los abductores del pulgar y del dedo meñique) abducen los dedos, mientras que los palmares (junto con el aductor del pulgar) los aducen. Ambos movimientos tienen lugar en las articulaciones metacarpofalángicas.

Cuando actúan de forma conjunta con los lumbricales, los interóseos flexionan las articulaciones metacarpofalángicas y extienden las interfalángicas de los cuatro dedos mediales (el movimiento en Z).

Vascularización

La vascularización de la mano se caracteriza por la presencia de múltiples anastomosis entre los vasos radiales y ulnares, y los palmares y dorsales.

En conjunto, las arterias de la mano constituyen una red anastomótica periarticular que se distribuye alrededor de las articulaciones colectivas del carpo y la mano. En consecuencia, en general todas las partes de la mano disponen de sangre en todas las posiciones y mientras se realizan funciones (agarre o prensión) que podrían afectar especialmente a las estructuras palmares.

Las arterias de los dedos también son capaces de constreñirse cuando hace frío para conservar el calor y de dilatarse (mientras la mano suda) para irradiar el exceso de calor.

La red venosa dorsal superficial suele utilizarse para la administración de líquidos por vía intravenosa.

Inervación

A diferencia de lo que sucede en los dermatomas del tronco y de las porciones proximales de los miembros, en la mano las zonas de inervación cutánea y las acciones de la inervación motora están bien definidas, al igual que los déficits funcionales.

Desde el punto de vista de su estructura intrínseca, el nervio radial sólo es sensitivo a través de su ramo superficial que se dirige al dorso de la mano.

El nervio mediano es el más importante en la función del pulgar y la sensibilidad de los tres dedos y medio laterales y la palma adyacente, mientras que el ulnar se encarga del resto.

Los músculos intrínsecos de la mano constituyen el miotoma T1.

Los nervios y vasos palmares son dominantes, y tienen a su cargo no sólo la cara palmar (más sensible y funcional) sino también la cara dorsal del extremo distal de los dedos (lechos ungueales).

Articulaciones del miembro superior

Articulaciones de la cintura escapular

Las articulaciones de la cintura escapular ayudan a la articulación del hombro a posicionar el miembro superior.

La articulación esternoclavicular une el esqueleto apendicular al esqueleto axial.

Las articulaciones esternoclavicular y acromioclavicular hacen posibles los movimientos en la unión escapulotorácica fisiológica, que aproximadamente se mueve 1° por cada 3° de movimiento del brazo (ritmo escapulohumeral). A su vez, unos dos tercios del movimiento de la unión escapulotorácica se deben a movimientos de la articulación esternoclavicular, y un tercio a movimientos de la articulación acromioclavicular.

La resistencia y la integridad de las articulaciones del complejo del hombro no están relacionadas con la congruencia entre las superficies articulares.

La integridad de las articulaciones esternoclavicular y acromioclavicular depende de ligamentos intrínsecos y extrínsecos, y del disco de la articulación esternoclavicular.

Articulación glenohumeral (del hombro)

La cavidad glenoidea de la escápula forma un receptáculo muy plano para la relativamente gran cabeza del húmero en esta articulación esferoidea; el rodete glenoideo aumenta sólo un poco (aunque de forma significativa desde el punto de vista de la estabilidad) la profundidad de la fosa.

Además, la laxitud de la cápsula fibrosa permite la amplia variedad de movimientos que aquí tienen lugar.

La estabilidad de la articulación del hombro se mantiene en gran medida gracias a la contracción tónica y activa de los músculos que actúan sobre ella, en particular de los del manguito de los rotadores.

En las personas de edad avanzada se produce con frecuencia una degeneración del manguito de los rotadores que provoca dolor, limitación de la amplitud y la fuerza de los movimientos, y una inflamación de las bolsas circundantes que resulta en una comunicación abierta con la cavidad articular.

Articulación del codo

Aunque la articulación del codo parece simple debido a que su función principal es la de un gínglimo, la verdad es que es una estructura sorprendentemente compleja de tres elementos, en la cual participan un hueso proximalmente y dos distalmente (uno de ellos rota).

El movimiento de bisagra, la capacidad para transmitir fuerzas y el alto grado de estabilidad de la articulación son primordialmente resultado de la configuración de las superficies articulares de la articulación humeroulnar (es decir, la que se establece entre la incisura troclear de la ulna y la tróclea del húmero).

La integridad de las funciones de la articulación humerorradial y del complejo de la articulación radioulnar proximal depende principalmente de la acción conjunta de los ligamentos colateral radial y anular.

La articulación radiohumeral es la porción del codo situada entre el capítulo (cóndilo) y la cabeza del radio.

Articulaciones radioulnares

La acción combinada de las articulaciones sinoviales radioulnares proximal y distal junto con la membrana interósea permite la pronación y la supinación del antebrazo.

El ligamento anular de la articulación proximal, el disco articular de la articulación distal y la membrana interósea no sólo mantienen los dos huesos juntos a la vez que permiten los movimientos necesarios entre ellos, sino que también (especialmente la membrana) transmiten fuerzas recibidas por la mano desde el radio hasta la ulna para que estas se dirijan en última instancia hacia el húmero y la cintura escapular.

Articulación radiocarpiana

Los movimientos del carpo desplazan toda la mano y contribuyen de forma dinámica a sus maniobras y movimientos, o estabilizan la mano en una posición determinada para maximizar la eficacia de esta y de los dedos en la manipulación y la sujeción de objetos.

Los numerosos huesos que integran el carpo le otorgan su complejidad y flexibilidad.

Se generan movimientos de extensión-flexión, abducción-aducción y circunducción.

La mayor parte de los movimientos globales del carpo tiene lugar en la articulación radiocarpiana, que se establece entre el radio y el disco articular de la articulación radioulnar distal por un lado y la hilera proximal de huesos carpianos (principalmente el escafoides y el semilunar) por el otro.

No obstante, los movimientos concomitantes en las articulaciones intercarpianas (especialmente la mediocarpiana) aumentan su amplitud.

Articulaciones de la mano

Las articulaciones carpometacarpianas de los cuatro dedos mediales, que comparten una cavidad articular común, tienen una limitada libertad de movimientos (en particular las de los dedos 2º y 3º), pero contribuyen a la estabilidad de la palma como base sobre y contra la que actúan los dedos.

Los movimientos tienen lugar en las articulaciones carpometacarpianas de los dedos 3º y 4º, en general cuando se agarra algo con fuerza o la palma adopta forma de copa, como sucede durante la oposición.

No obstante, la gran movilidad de la articulación carpometacarpiana del pulgar (una articulación en forma de silla de montar) proporciona la mayor parte de su amplitud de movimientos y, en concreto, permite su oposición.

En consecuencia, la articulación carpometacarpiana es clave para la eficacia de la mano humana. A diferencia de las articulaciones carpometacarpianas, las metacarpofalángicas de los cuatro dedos mediales ofrecen una considerable libertad de movimientos (flexión-extensión y abducción-aducción), mientras que la del pulgar está limitada a la flexión-extensión, al igual que todas las interfalángicas.

Leer más:

  • 01. Descripción General del Miembro Superior

    Visión general del miembro superior.

  • 02. Diferencias entre Miembros Superior e Inferior

    Comparación entre los miembros superior e inferior.

  • 03. Huesos del Miembro Superior

    Apuntes sobre los huesos del miembro superior: clavícula, escápula, húmero, huesos del antebrazo, huesos de la mano, y anatomía de superficie de los huesos del miembro superior.

  • 04. Fascias, Vasos Eferentes, Inervación Cutánea y Miotomas del Miembro Superior

    Apuntes sobre las fascias, vasos eferentes, inervación cutánea y miotomas del miembro superior: fascia del miembro superior, drenaje linfático del miembro superior, inervación cutánea del miembro superior, e inervación motora (miotomas) del miembro superior.

  • 05. Regiones Pectoral y Escapular

    Apuntes sobre las regiones pectoral y escapular: músculos axioapendiculares anteriores, músculos asioapendiculares posteriores y escapulohumerales, y anatomía de superficie de las regiones pectoral, escapular y deltoidea.

  • 06. Axila

    Apuntes sobre la axila: arteria axilar, vena axilar, nódulos linfáticos axilares, y plexo braquial.

  • 07. Brazo

    Apuntes sobre el brazo: músculos del brazo, arteria braquial, venas del brazo, nervios del brazo, fosa del codo, y anatomía de superficie del brazo y de la fosa del codo.

  • 08. Antebrazo

    Apuntes sobre el antebrazo: compartimentos del antebrazo, músculos del antebrazo, arterias del antebrazo, venas del antebrazo, venas del antebrazo, nervios del antebrazo, y anatomía de superficie del antebrazo.

  • 09. Mano

    Apuntes sobre la mano: fascia y compartimentos de la palma, músculos de la mano, tendones de los flexores largos y vainas tendinosas de la mano, arterias de la mano, nervios de la mano, y anatomía de superficie de la mano.

  • 10. Articulaciones del Miembro Superior

    Apuntes de las articulaciones del miembro superior: articulación esternoclavicular, articulación acromioclavicular, articulación del hombro, articulación del codo, articulación radioulnar proximal, articulación radioulnar distal, articulación radiocarpiana, articulaciones intercarpianas, …