Prevención y Control de Infecciones

Conceptos clave

La higiene de manos es la técnica más importante para utilizar en la prevención y control de la transmisión de infecciones.

La posibilidad de que los microorganismos causen la enfermedad depende de la cantidad de organismos, virulencia, capacidad de entrar y sobrevivir en un huésped y de la susceptibilidad del huésped.

La flora normal del cuerpo ayuda a resistir la infección liberando sustancias antibacterianas e inhibiendo la multiplicación de microorganismos patógenos.

Los signos de la inflamación localizada y de la infección son idénticos.

Una infección puede desarrollarse siempre y cuando los seis elementos que componen la cadena de infección estén de forma ininterrumpida.

Los microorganismos se transmiten por contacto directo e indirecto, propagación por vía aérea y por los portadores y artículos contaminados.

El aumento de la edad, la alimentación deficiente, el estrés, las enfermedades heredadas, la enfermedad crónica y los tratamien­tos o problemas que comprometen la respuesta inmunológica aumentan la susceptibilidad a la infección.

Entre las zonas principales de las infecciones asociadas con la atención sanitaria se incluyen los tractos urinario y respiratorio, el torrente sanguíneo y las heridas quirúrgicas o traumáticas.

Los CDC recomiendan ahora el uso de antisépticos sin agua a base de alcohol como alternativa al lavado de manos a menos que las manos estén visiblemente sucias.

Los procedimientos invasivos, las terapias médicas, la hospitalización larga y el contacto con el personal de atención sanitaria aumentan el riesgo de un paciente hospitalizado de adquirir una infección asociada con la atención sanitaria.

Las prácticas de aislamiento pueden evitar que el personal y los pacientes adquieran infecciones y la transmisión de microorganismos a otras personas.

Según las precauciones estándares, hay que utilizar técnicas ge­néricas de barrera cuando se atiende a todos los pacientes.

La limpieza correcta requiere la retirad a mecánica de toda la suciedad de un objeto o área.

Un paciente en aislamiento está sujeto a privación sensorial debido a la restricción del entorno.

Un profesional de prevención y control de infecciones controla la incidencia de infecciones dentro de una institución y proporciona servicios formativos y de consulta.

La asepsia quirúrgica requiere técnicas más estrictas que la asepsia clínica y está dirigida a eliminar los microorganismos.

Si la piel se rompe o si se realiza un procedimiento invasivo en una cavidad del cuerpo normalmente libre de microorganismos, hay que seguir las prácticas de asepsia quirúrgica.

Anterior
Siguiente